Real Decreto 1514/20017 de 16 de noviembre "Las cuentas anuales de una empresa comprenden el balance, la cuenta de pérdidas y ganancias, el estado de cambios en el patrimonio neto, el estado de flujos de efectivo y la memoria. Estos documentos forman una unidad. No obstante, el estado de flujos de efectivo no será obligatorio para las empresas que puedan formular balance, estado de cambios en el patrimonio neto y memoria abreviados"
Existen dos documentos normalizados que reúnen los datos esenciales para analizar la situación economicofinanciera de un vistazo:
- La cuenta de Pérdidas y Ganancias, recoge los ingresos y gastos del periodo y la diferencia entre ellos nos da las pérdidas o beneficios.
- El Balance de Situación que relaciona el conjunto de bienes, derechos y obligaciones que una empresa tiene en un momento determinado.
Existen otros documentos que amplían y detallan la información como es la memoria, el estado de flujos de efectivo y el estado de cambios en el patrimonio neto. Sin embargo con el balance y la cuenta de resultados podemos saber si una empresa va mal, qué problemas puede tener de liquidez, solvencia, etc.
Si nos centramos en el análisis del balance podemos obtener la siguiente información:
- Situación de liquidez o capacidad de pago
- Endeudamiento.
- Independencia financiera
- Ofrece garantías patrimoniales ante terceros.
- Capitalización, ¿es correcta la proporción entre capitales propios y deudas?
- Gestión de los activos.
- Equilibrio financiero.
EL BALANCE
El Balance representa la situación patrimonial de la empresa en un momento determinado, es un concepto estático, como una fotografía.
El Balance nos va a decir lo que la empresa tiene y lo que debe, tendremos por un lado la inversión, que son todos los bienes y derechos propiedad de la empresa como pueden ser una furgoneta, los ordenadores, las mercancías, el dinero en el banco, etc. Y por otro lado tendremos la financiación, en el que podemos incluir el capital aportado, lo que debemos a los proveedores, hacienda, bancos, etc.
Se denomina activo a lo que la empresa tiene y patrimonio neto más pasivo lo que la empresa debe. Siempre se cumple la siguiente ecuación:
Activo = Patrimonio Neto + Pasivo, o lo que es lo mismo, todo lo que la empresa tiene se lo debe a alguien.
El balance es la principal fuente de información para saber cuál es la situación financiera de una empresa, la capacidad que tiene una empresa para hacer frente a sus obligaciones de pago, ya que en él se encuentran relacionados todas las deudas de la empresa y los bienes disponibles para hacerles frente.
CONCEPTOS BÁSICOS:
EL ACTIVO: El activo de una empresa está constituido por los bienes, derechos y otros recursos
controlados por la empresa resultante de sucesos pasados, de los que se espera que la empresa
obtenga rendimientos futuros. Se ordena según la liquidez de los elementos, es decir, según la capacidad de convertirse en disponible.
Los activos se pueden dividir en:
- Activos no corrientes. Son recursos con una duración permanente (superior a un año) y no pensados para la venta. Se trata de maquinarias, coches u otros vehículos de empresa, ordenadores, patentes, terrenos, oficinas, etc. También se conocen como activos fijos o inmovilizado.
- Activos corrientes. Tienen una duración a corto plazo (inferior a un año) y están destinados a la venta. Se trata de materias primas o mercaderías que serán objeto de venta o facturación (existencias), las deudas que tienen tus clientes con tu empresa (realizable) y el dinero que tu empresa dispone en efectivo y en sus cuentas bancarias (disponible). También se conocen como activos corrientes o activos circulantes.
EL PASIVO: (recursos ajenos)está constituido por obligaciones actuales surgidas como consecuencia de
sucesos pasados, para cuya extinción la empresa espera desprenderse de recursos que puedan
producir beneficios o rendimientos económicos en el futuro. A estos efectos, se entienden
incluidas las provisiones.
Se ordena según la exigibilidad de los elementos, es decir, en función de la capacidad que tienen los elementos de pasivo de ser exigidos en un momento determinado.
Se ordena según la exigibilidad de los elementos, es decir, en función de la capacidad que tienen los elementos de pasivo de ser exigidos en un momento determinado.
El pasivo se clasifica:
- Los pasivos corrientes. Deudas y obligaciones a corto plazo (inferior a un año) en los que podemos incluir sueldos, impuestos, deudas comerciales, etc.
- Los pasivos no corrientes. Son las deudas y obligaciones a largo plazo (superior a un año)
ANALIZAR UN BALANCE
Una vez que tenemos claro lo que es un balance, trataremos de realizar un análisis claro y sencillo utilizando el sentido común, que con solo un vistazo podamos saber cuál es la situación patrimonial y financiera de una empresa. Existen multitud de ratios que nos darán una cantidad de cifras inútiles, difíciles de interpretar y que no nos llevarán a ninguna conclusión práctica.
OBJETIVO: saber cuál es la situación financiera de la empresa, cómo se ha llegado a ella, ver la evolución para establecer una tendencia y poder preveer hacia dónde se dirige, y tener la oportunidad de tomar decisiones.
En primer lugar de un solo vistazo al activo, podemos saber si el tamaño del activo es el adecuado. La representación gráfica general del activo es la siguiente:
OBJETIVO: saber cuál es la situación financiera de la empresa, cómo se ha llegado a ella, ver la evolución para establecer una tendencia y poder preveer hacia dónde se dirige, y tener la oportunidad de tomar decisiones.
En primer lugar de un solo vistazo al activo, podemos saber si el tamaño del activo es el adecuado. La representación gráfica general del activo es la siguiente:
Si el activo difiere de este esquema será debido a la actividad de la empresa, el balance ideal con el que debería trabajar toda empresa, sería aquel que en función de su actividad más se pareciese a los siguientes:
- Empresas industriales, fabriles o transformadoras al 100%: inversión elevada en inmovilizado, necesidad de una financiación a largo plazo.
- Empresas comerciales, el peso de su activo corriente será importante en relación al total activo, y dentro del mismo cobrará más importancia la cuenta de existencias, son empresas que no transforman, sino que venden lo mismo que han adquirido. La mayor parte de su financiación es a corto plazo, es decir, la obtenida de sus proveedores.
- Empresas de servicios, es la que tiene el volumen de inversión más reducido, la cuenta que cobrará más importancia será la de clientes.
- Si el activo corriente supera al pasivo corriente, tenemos suficiente liquidez para hacer frente a las deudas que vencen en un plazo inferior a un año.
- Si los recurso permanentes (fondos propios y pasivo a largo plazo) cubren totalmente los activos no corrientes.
Si se cumplen estos dos requisitos estaremos hablando de una empresa equilibrada financieramente.
Con este método podemos hacer una rápida comprobación de las cifras de los estados financieros de dos años consecutivos, y de esta manera ver cual ha sido la evolución de la empresa. También se puede tomar una serie de años superior a dos y de esta forma observar la evolución de la empresa.
Es deseable poder hacer una comparación con los datos medios del sector al que pertenecemos y aplicarse a otros estados financieros como la cuenta de pérdidas y ganancias, cuadro de financiación y estados de tesorería.
En tercer lugar, podemos calcular también los porcentajes de las distintas masas patrimoniales. Contando con la representación gráfica del balance, y pudiendo comparar las distintas masas que lo componen, podemos empezar a obtener conclusiones visuales sobre su equilibrio, endeudamiento, etc.
Realizaremos un estudio general que luego se podrán ampliar con otras más específicas:
Activo corriente y pasivo corriente. Determinar hasta donde alcanza la suma de su saldo disponible en caja y bancos, más el cobro de todas sus cuentas a cobrar, más la venta de la totalidad de sus existencias, en relación a sus deudas a corto plazo. Obtendremos el volumen de liquidez con que la empresa cuenta para atender sus pagos a corto plazo. Se pueden dar diferentes situaciones:
Es deseable poder hacer una comparación con los datos medios del sector al que pertenecemos y aplicarse a otros estados financieros como la cuenta de pérdidas y ganancias, cuadro de financiación y estados de tesorería.
En tercer lugar, podemos calcular también los porcentajes de las distintas masas patrimoniales. Contando con la representación gráfica del balance, y pudiendo comparar las distintas masas que lo componen, podemos empezar a obtener conclusiones visuales sobre su equilibrio, endeudamiento, etc.
Realizaremos un estudio general que luego se podrán ampliar con otras más específicas:
Activo corriente y pasivo corriente. Determinar hasta donde alcanza la suma de su saldo disponible en caja y bancos, más el cobro de todas sus cuentas a cobrar, más la venta de la totalidad de sus existencias, en relación a sus deudas a corto plazo. Obtendremos el volumen de liquidez con que la empresa cuenta para atender sus pagos a corto plazo. Se pueden dar diferentes situaciones:
- Activo corriente igual al pasivo corriente (fondo de maniobra cero), en este caso las deudas a corto plazo están financiadas por el activo corriente de la empresa. Tenemos que saber como esta formado ese activo corriente, ya que si la mayor parte está formado por existencias habrán de venderse para hacer frente a las deudas a corto plazo y no siempre es fácil venderlas. Lo lógico sería que el disponible más el realizable fuese suficiente para cubrir el pasivo corriente y así evitar el peligro de la "suspensión de pagos".
- Activo corriente mayor a pasivo corriente (fondo de maniobra positivo), en este caso activo corriente estará financiando al pasivo corriente y parte del pasivo a largo plazo, lo que se traduce en una situación financiera sólida. Pero, ¿cuánto mayor ha de ser el activo corriente? Esto dependerá del tipo de sector al que pertenezca la empresa, pero si el activo corriente es mayor al doble del pasivo corriente, puede que se este infrautilizando su activos corrientes y obtenga poca rentabilidad, debería evaluarse la posibilidad de reducir los excesos de existencias, deudores comerciales o efectivo.
- Activo corriente inferior al pasivo corriente (fondo de maniobra negativo), en este caso parte de las deudas a corto plazo se tienen que hacer frente con activo no corriente, situación peligrosa que nos puede llevar a una suspensión de pagos, pues no se genera suficiente flujo de caja para hacer frente a las deudas a corto plazo.
Efectivo más deudores y pasivo corriente. Mediante esta comparación queremos saber hasta donde podría atender la empresa sus compromisos a corto plazo sin vender nada más. Nos dará una idea del volumen de tesorería con que puede contar la empresa para atender sus pagos. Es posible que la empresa tenga problemas de tesorería y por lo tanto para mejorar la situación tenga que reducir deudas a corto plazo mediante una ampliación de capital, reducir o eliminar el pago de dividendos, aumentar la autofinanciación, reconvertir deuda a corto plazo en deuda a largo plazo, vender activo no corrientes extra funcionales...
Patrimonio neto y patrimonio neto más pasivo. (Solidez de la empresa). Qué proporción representan los recursos propios frente al total de los recursos utilizados para su funcionamiento, se determina hasta que punto la empresa posee una autonomía propia, o esta excesivamente endeudada.
Generalmente las empresas puramente comercializadoras pueden desenvolverse con porcentajes de endeudamiento más elevados que las puramente fabriles o transformadoras.
En una empresa fabril o transformadora pueden darse los siguientes casos:
- Patrimonio neto que representa el 40 o 50 % del total de los recursos, esta empresa esta suficientemente capitalizada.
- Patrimonio neto que representa menos del 40%, será un empresa descapitalizada, le falta capital y le sobran deudas, y tendrá que ampliar capital, o tomar medidas para generar más beneficios destinados a su autofinanciación.
- Patrimonio neto representa más del 50%, puede tener un capital excesivo del que no está obteniendo una buena rentabilidad o represente un esfuerzo importante para los accionistas.